Prepara tu piel para el verano: consejos y trucos para dar la bienvenida al sol

Ya hace más calorcito y probablemente hayas hecho el cambio de armario y dejado en un rincón los abultados jerséis. Ahora es momento de poner un poco de atención a tu piel. Somos conscientes de que todavía no es momento para pasearse por la playa en bikini pero sí de empezar a dedicar especial atención a nuestros brazos, hombros, espalda, piernas y pies: esas partes que vamos sacando a relucir poco antes del verano. Con nuestros #beautytips de la semana conseguirás una piel radiante que desearás enseñar.

1. Pies ásperos y agrietados

– ¿Por qué ocurre? Después de una temporada pisando fuerte con nuestras botas favoritas y siendo sinceras, escatimando en pedicuras, nuestros pies pueden verse afectados y hasta puede llegar a ser doloroso.

– Solución: sin duda hay muchos remedios para hidratar la piel, pero los pies son muy especiales. Lo más recomendable es utilizar productos específicos para el cuidado de esta zona. Aplica por las mañanas una loción que suavice la piel. Por la noche, sumerge los pies en agua templada y aplica un exfoliante para eliminar las pieles muertas. A continuación utiliza una crema nutritiva y cubre tus pies con calcetines para una mayor absorción del producto, lo recomendable es que duermas con ellos.

 2. Espinillas en escote y espalda

– ¿Por qué ocurre? Cuando en invierno hacemos ejercicio o nos abrigamos demasiado nuestro cuerpo puede absorber sudor y aceites. Éstos, se pueden mezclar con la piel muerta y las bacterias formando esas molestas espinillas.

– Solución: Utiliza diariamente un gel de baño con ácido salicílico o peróxido de benzoico para matar las bacterias y destapar los poros. Estos ácidos ayudan a eliminar las rojeces una vez los granitos se han secado.

3. Problema: Rojeces en los brazos y muslos

– ¿Por qué ocurre? Normalmente esto sucede por la Queratosis Pilaris, también conocida como piel de gallina es una condición genética de la piel muy común en la cual se muestran granos o rojeces debido a las células muertas y exceso de keratina.

– Solución: Utiliza geles y lociones hidratantes especiales para pieles atópicas para hidratar la piel con mayor intensidad.

4. Depilación: hidrata siempre tus piernas

– ¿Por qué es importante? La piel de las piernas no produce demasiados aceites, por lo que es muy recomendable después de una depilación una crema hidratante para calmar y nutrir la piel para prevenir una posterior irritación.

– Elimina el bello sin dañar la piel: No somos partidarias del afeitado, pero sabemos que algunas veces necesitamos una solución rápida. En esta situación lo mejor que puedes hacer para proteger al máximo tu piel es suavizar el bello con el vapor de la ducha durante 3 minutos aproximadamente. Si realmente la única solución es la cuchilla, es mejor que utilices una crema o gel especial para depilación, ya que el jabón reseca más la piel. No obstante, te aconsejamos que sea cual sea tu tipo de depilación, hidrates tu piel al terminar.

5. Depilación: zona del bikini

– ¿Por qué es importante? El bello del área del bikini es propenso a crear quistes, que si no se presta atención acaban infectándose. Además es un área con muchas terminaciones nerviosas, por lo que a parte de ser dolorosa es muy sensible.

– Elimina el bello sin dañar la piel: lo mejor es eliminarlo desde la raíz, por ejemplo con la cera. Sólo es molesto durante un segundo y no tienes que volver a preocuparte por ello en un mes. Para un resultado óptimo, asegúrate de que el bello mide alrededor de 2 a 5 mm. Depilarse regularmente y utilizar una loción hidratante después, ayudará al bello a no entrar de nuevo en la piel y provocar el quiste. Los resultados con cera duran hasta dos veces más que el afeitado y permiten debilitar poco a poco el bello.

6. Piel bronceada

Recuerda: tu piel no ha estado expuesta al sol durante un largo período, por lo que tenemos que darle tiempo para acostumbrarse. En los días soleados de primavera, recuerda utilizar productos con un factor elevado de protección solar para evitar quemaduras. Protege tu rostro y cuello y asegúrate de que tus brazos, manos y pies están bien protegidos, son los primeros expuestos al sol.

Importante: disfruta del sol de forma segura, no sólo protegiendo tu piel sino hidratando tu organismo bebiendo más agua de lo habitual.

fuente: www.thuya.com

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