Seamos realistas: la mayoría de los hombres mejorarían con una buena pedicura…y manicura.
Aunque a menudo no quieran admitirlo necesitan a toda una experta, pero ese “pánico” a los salones de belleza hace que acaben resignándose a unas manos y pies dignos de un leñador. Es cierto, sin embargo, que cada vez más los hombres se animan a asistir a ciertos tratamientos, pero todavía queda mucho camino por recorrer hasta que se sientan como en casa. En el post de hoy os dejamos con 3 maneras fáciles de intentar captar al público masculino en tu centro:
1. Añade un toque de testosterona. Los hombres pueden sentirse intimidados fácilmente por un salón si es demasiado femenino. Una manera sencilla de hacer que no se sientan fuera de lugar es reducir la decoración en exceso. No estamos hablando de incluir llantas de coche o pantallas con partidos de fútbol en la decoración, simplemente limítate a no pasarte con las flores o los colores chillones. Mira de fijar tu decoración en colores tipo tierra o con un estilo más sobrio que no asuste a los hombres pero siguiendo siempre una línea elegante y pulida.
2. Horarios. Todas las que hayamos ido de compras con nuestras parejas sabemos lo que implica: tener prisa. Pues bien, lo mismo sucede con una visita al salón. Van con una única idea: no entretenerse y acabar cuanto antes. Para hacer más llevadera su experiencia, especialmente si se trata de una primera vez, lo mejor es programar su cita en un día menos ocupado. Esto nos puede ayudar a acelerar la duración del servicio y hacerle más llevadera la experiencia en el salón.
3. Anunciate de forma pícara. La mejor manera de llegar a un hombre es a través de su novia o de su mujer. Hacer determinadas ofertas para tratamientos masculinos o dar a las clientas panfletos o flyers que puedan llevar a casa y contarle la experiencia a la pareja es la mejor manera de entrar en contacto con el público masculino. No hay nada mejor que alentar a un nuevo cliente con alguien de confianza.
¿Qué os han parecido estos consejos?
fuente : thuya.com
